La moción parlamentaria modifica el Código Sanitario incorporando dos nuevos artículos. La iniciativa cuenta con el respaldo de las diputadas Marcela Hernando (PR), Daniella Cicardini (PS), Denise Pascal (PS), Maya Fernández (PS), Loreto Carvajal (PPD); y los diputados Guillermo Teillier (PC), Víctor Torres (DC), y Daniel Melo (PS).
Esta tarde los diputados Karol Cariola y Juan Luis Castro presentaron una moción parlamentaria que permitiría el cultivo de cannabis para el tratamiento de enfermedades previa orden médica. Esta iniciativa surge luego del intento fallido por despenalizar el autocultivo mediante un proyecto de ley, el que finalmente no contó con el apoyo del Ejecutivo ni del total de la comisión.
La presidenta de la Comisión de Salud, diputada Cariola, explicó que “tomamos una decisión que es cruda, nos hubiese gustado avanzar mucho más con un proyecto que hacía no solo referencia al uso medicinal sino que también al uso recreativo y a otras regulaciones relativas a la cannabis. Lamentablemente, las trabas que se pusieron en el camino no nos pueden hacer seguir esperando para que los niños, las madres, y sobre todo para aquellas personas que hoy utilizan la cannabis con fines medicinales, no lo puedan hacer y tengan que seguir arriesgándose todos los días a la persecución legal a partir de una ley 20.000 que no da abasto ni está a la altura de esta necesidad”.
Cariola, explicó que la nueva propuesta busca “resguardar el derecho de las madres y de las personas que hoy día padecen de alguna patología, la posibilidad de cultivar cannabis y utilizarla con fines medicinales, a través de una modificación del Código Sanitario que permite que los profesionales de la salud que hoy día ya están entregando como prescripción la cannabis para el uso medicinal de distintas patologías, lo puedan seguir haciendo y que ese sea el único respaldo necesario para que las familias puedan cultivar”.
En la misma línea, el diputado Juan Luis Castro manifestó su descontento respecto de la tramitación del proyecto inicial, discusión donde “los sectores más conservadores del parlamento han puesto trabas al debate y han ido desdibujando el proyecto. Tenemos la convicción que la marihuana tiene un efecto terapéutico”.
Castro agregó que “estamos pidiendo que cualquier profesional de la salud pueda prescribir marihuana en cualquiera de sus fórmulas y pueda despachar esta receta con tranquilidad a los pacientes aquejados de diversas patologías. Esta ley corta llega al propósito final que queremos, vale decir, consagrar de una vez por todas que la cannabis tiene propiedades médicas”.
La presidenta de la organización Mamá Cultiva, Paulina Bobadilla, cuya hija padece de epilepsia refractaria, hizo un llamado a los parlamentarios a avanzar en esta materia y apoyar la iniciativa. “Mi hija usaba seis anticonvulsivos, no tenía calidad de vida, nos golpeaba, se golpeaba, seguía con convulsiones y en la cannabis encontramos un alivio. Pedimos a los legisladores que apoyen esta nueva ley, simplemente no podemos seguir esperando”.
Por su parte, la directora ejecutiva de Fundación Daya, Ana María Gazmuri, valoró el nuevo proyecto de ley y recordó que semanalmente son 200 pacientes nuevos los que llegan a su organización en busca de ayuda para sus tratamientos médicos.
Gazmuri agregó que la nueva moción “va en la dirección de garantizar que una prescripción médica sea prueba suficiente de que ese cultivo está destinado a un uso medicinal y cesar así de esta grave vulneración de derechos que afecta principalmente a niños con severas enfermedades neurológicas y también a muchos adultos mayores, a pacientes oncológicos y de diversas patologías de difícil manejo”.