Superintendencia de Electricidad y Combustibles, SEC, reiteró a la ciudadanía la importancia de evitar intoxicaciones por monóxido de carbono o explosiones por accidentes con gas, para lo cual es fundamental tener una actitud preventiva en el uso de los sistemas de calefacción.
El Director Regional de SEC O’Higgins, Ricardo Miranda, explicó que “antes de comprar una estufa es fundamental definir las necesidades de calefacción que tiene cada familia, ya que no es lo mismo calefaccionar un hogar con bebés o adultos mayores, que requieren un calor permanente, que un departamento de dos adultos, que trabajan y que están gran parte del día fuera”.
Miranda señaló que esta definición se puede realizar a partir de cuatro factores: seguridad, emisiones, operación y costos. En seguridad se debe analizar aspectos como la presencia de niños pequeños, que pudieran entrar en contacto con estufas, para evitar quemaduras.
Las emisiones son un elemento importante, ya que las estufas que funcionan con gas o parafina, generan monóxido de carbono, gas venenoso imperceptible, invisible y sin olor, que puede generar, en caso de intoxicación, dolores de cabeza, mareos, náuseas, confusión o debilitamiento general e incluso la muerte, por lo que se recomienda ventilar, periódicamente los espacios a calefaccionar.
El tercer aspecto destacado por Ricardo Miranda es la operación, “donde se debe revisar el tipo de recarga que se requiere, pues hay que considerar que algunos combustibles como el kerosene deben ser comprado en las estaciones de servicio, bajo ciertos aspectos de seguridad. También es clave conocer el procedimiento de encendido y apagado, revisar si es rápido y si se puede realizar dentro de la vivienda o si debe ser fuera de ella”.
Por último, un tema no menor es el costo, tanto del artefacto como del energético a usar. También hay que saber los valores de las mantenciones, las que deben ser anuales, ojalá antes del primer uso de la temporada. Y considerar también el precio del energético a usar, ya sea de la electricidad, del gas licuado o del kerosene.
Es importante señalar que todas las estufas y equipos de calefacción deben contar con su SELLO SEC, etiqueta que certifica que han superado una serie de pruebas de seguridad y que cumplen con los estándares que exige la normativa.
SEGURIDAD ANTE TODO.
Con respecto a las estufas compradas en años anteriores, las recomendaciones son realizar una mantención anual con el Servicio Técnico Autorizado por cada marca, o con Instaladores Autorizados por la SEC.
Tampoco se deben ubicar prendas de vestir sobre las estufas para secarlas, puesto que estos equipos generan un importante calor y eso puede dar origen a incendios. También se recomienda no ubicarlas cerca de cortinas o de otros elementos inflamables.
En el caso de las estufas eléctricas, la principal recomendación es no ingresarlas a baños, para evitar el contacto con el agua, pues ello podría generar corto circuitos, electrocuciones y hasta incendios.
El Director Regional de SEC O’Higgins añadió que “hemos sido testigos, en estos últimos días, de diversas emergencias vinculadas al uso del gas, lo que demuestra la importancia de realizar una buena mantención y de seguir los consejos de operación de los artefactos que funcionan con este energético. Aquí la seguridad debe ser un elemento prioritario para evitar tragedias durante la época invernal”.
Por último, ante situaciones de potencial riesgo en el uso de los sistemas de calefacción, la ciudadanía los puede denunciar desde su celular, ingresando a www.sec.cl en el navegador, mientras que las consultas pueden ser efectuadas en las oficinas presentes en la región, las municipalidades en convenio o bien en el FONO SEC (600 6000 732).