La representantes de O’Higgins emplazo a las autoridades a ejecutar los trabajos que sean necesarios para evitar que se produzcan catástrofes como la de mediados de junio.
A raíz de la llegada de un nuevo sistema frontal en la zona centro sur del país, que se pronostica para este jueves y con mayor intensidad durante el fin de semana, la diputada por la Región de O’Higgins, Natalia Romero, llamó a las actuales autoridades, entre ellas las del Ministerio de Obras Públicas, a adoptar todas las medidas preventivas que sean necesarias para evitar que se produzcan situaciones como las ocurridas a mediados de junio, cuando los desbordes de ríos provocaron graves inundaciones en una serie de comunas, dejando a miles de damnificados.
Al respecto, la parlamentaria hiso eco a los distintos pronósticos que se han entregado durante estos días, donde se advierte que incluso podrían caer hasta 100 milímetros de lluvia en un plazo de cinco días. Por lo mismo, y considerando las graves consecuencias que provocó el último sistema frontal en la zona, además de la lentitud con la que se ha llevado adelante el proceso de reconstrucción, Romero insistió en su llamado al Gobierno a actuar de manera “preventiva”, asegurando que “no podemos permitir que se repitan imágenes de hace dos meses”.
“Todos los pronósticos meteorológicos anticipan un sistema frontal de gran envergadura, sobre todo durante el fin de semana, con condiciones que pueden llegar a ser muy similares a las de mediados de junio, cuando comunas como Coltauco sufrieron la inundación de un 70% de su territorio. Por eso es fundamental que las actuales autoridades, como las del MOP y las que tengan un rol importante en la materia, puedan realizar todas las obras que sean necesarias, como el encauzamiento de los ríos, el despeje de escombros, la habilitación de barreras, entre otras, de tal manera de evitar que se repita el lamentable escenario que vivimos hace dos meses”, señalaron ambos parlamentarios.
En esa línea, la diputada Romero también solicitó al Ejecutivo preocuparse por las ayudas comprometidas a los damnificados que dejó la anterior emergencia, donde casi tres mil viviendas quedaron con un daño mayor en la región y cerca de 300 terminaron completamente destruidas, además de los efectos negativos que tuvo en los pequeños y medianos agricultores de la zona, quienes sufrieron con la destrucción de bocatomas, compuertas y distinta infraestructura.
Justamente, la representante de O’Higgins recordó que debido a la anterior catástrofe, que dejó a más de ocho mil personas damnificadas en la zona, solicitó al Ejecutivo aumentar al doble ($3 millones) el monto del bono enseres para quienes perdieron sus hogares, además de condonar el pago de contribuciones de bienes raíces de las propiedades que se vieron gravemente afectadas.
“El Gobierno tiene la obligación de prevenir que se produzcan nuevas emergencias en nuestra región, y para ello es fundamental que actúen de manera proactiva y no esperen la llegada del sistema frontal para recién reaccionar. De lo contrario, podríamos estar lamentando otra catástrofe que perfectamente debería evitarse”, reiteró la diputada, Natalia Romero.