Gracias a invitación cursada por la Delegación Presidencial de O’Higgins.
El Desfile del 2 de Octubre tiene un arraigo muy propio para los rancagüinos, el que ha ido pasando de generación en generación, y que provoca un gran entusiasmo en la comunidad por ser parte de esta verdadera fiesta cívico-militar. Ese sentimiento se vivió ayer en toda su gloria con la conmemoración de los 210 años de la Batalla de Rancagua.
Pero justamente ese sentimiento de orgullo lo tenía una familia que llegó hasta el Estadio El Teniente para dar testimonio de la gratitud que sienten ante las muestras de fervor por los héroes chilenos, y en especial por Bernardo O’Higgins, quien es considerado como el Padre de la Patria. Se trata de la familia de Leonila del Canto, familiar en sexta generación del prócer Bernardo O’Higgins, quien llegó junto a su esposo Jan Daniel Kasendra y sus dos hijos, para agradecer esta “maravillosa fiesta que brinda Rancagua, que para nosotros tiene una especial connotación y estamos comprometidos con la región gracias al cariño que hemos visto de la gente y al respeto por lo que es nuestra patria e historia”.
Leonila del Canto, quien es Presidenta de la Fundación Bernardo O’Higgins, resaltó que “ha sido todo muy emotivo, y estamos muy agradecidos del Delegado Presidencial por la invitación que nos hizo para estar en este desfile. Nosotros cada 5 años tenemos el compromiso de hacernos presentes acá en la región, como una manera también de agradecer a la comunidad el cariño y el respeto que guardan hacia el libertador”.
Finalmente, resaltó que “a través de la Fundación tratamos de mantener su legado, difundir su vida y obra, lo que es muy importante para el resguardo de nuestra historia, y para que los valores patrios trascienden a nuevas generaciones”.
Sobre la presencia de la familia de Bernardo O’Higgins, el Delegado Presidencial de O’Higgins, Fabio López, indicó que “tal como dije al término del desfile, Rancagua y nuestra región en general, siente y recuerda con orgullo la Batalla de Rancagua, que marca el fin de la Patria Vieja con el paso de las fuerzas de O’Higgins hacia Argentina, y la posterior recuperación y reorganización del Ejército Libertador, lo que finalmente gatilla en la Independencia de Chile en 1818. Por eso es tan importante esta conmemoración, mal llamada, de la Batalla de Rancagua, porque es muchísimo más que eso, ya que marca un hito importante para el desarrollo futuro de lo que hoy día somos como nación. Así que contar con la presencia de la familia de un héroe nacional en la conmemoración de los 210 años, es un orgullo para todos nosotros”.
