La Fundación para la Innovación Agraria, junto a INDAP, CONAF, CNR, INFOR E INIA, participaron activamente en talleres convocados por los SEREMI de Agricultura de las regiones de O’Higgins, Maule y Biobío, para escuchar a los damnificados y diseñar soluciones con la participación de los propios agricultores afectados con la catástrofe. Una segunda fase contempla el desarrollo de propuestas innovadoras para la rehabilitación productiva por medio de Pilotos de Innovación Territorial en Restauración en aquellas zonas más afectadas por los incendios, generando con ello una red de innovación interregional.
Luego de los mega incendios ocurridos en enero-febrero de este año en nuestro país, la Fundación para la Innovación Agraria FIA, junto a otros servicios del Ministerio y las Seremi de Agricultura, diseñaron una serie de talleres con el fin de generar una conversación con productores pertenecientes a la agricultura familiar campesina, fuertemente afectadas por la catástrofe.
Fueron tres talleres que se realizaron en las regiones de Maule, Biobío y O’Higgins, en los cuales participaron cerca de 200 productores en total. El objetivo fue dialogar con los afectados, identificar los principales problemas que los aquejan en las zonas de secano dañadas por los incendios forestales, levantar propuestas en conjunto con las comunidades de la agricultura familiar campesina, difundir los instrumentos creados por el Ministerio de Agricultura y el Gobierno para apoyar a los afectados.
Un trabajo que, según explica la directora de FIA María José Etchegaray, está focalizado en la reconstrucción productiva de los territorios. “En ellos escuchamos la voz de los agricultores para hacer un levantamiento de las dificultades surgidas post catástrofe, como también plantear posibles medidas que a juicio de ellos se podrían implementar. Estas instancias de encuentro y debate generaron gran interés; sólo en la última sesión llegaron cerca de 80 productores”, enfatiza la ejecutiva.
Quienes participaron de estas jornadas fueron dirigentes campesinos del Consejo Asesor Regional (CAR) y los Comités de Agencia de Área (CADA) pertenecientes a los territorios afectados, agricultores afectados, como también profesionales y técnicos de los organismos estatales pertinentes tales como INDAP, CNR, CONAF, INIA e INFOR.
En cada uno de estos talleres estuvieron presentes los seremis de Agricultura de las regiones respectivas, quienes presentaron un breve diagnóstico y el estado del arte de la acción del ministerio en relación a los incendios y sus efectos. Las conclusiones en tanto fueron entregadas por el director nacional de INDAP, Octavio Sotomayor.
La metodología aplicada fue conversada con todos los servicios del agro y luego diseñada por profesionales de FIA, quienes se encargaron de ser los moderadores de estas jornadas. En cada una de las instancias desarrolladas se pudo escuchar por parte de los pequeños productores diversas dudas sobre la continuidad de sus cultivos o la posibilidad de reorientar su producción.
Proceso impulsado por FIA post catástrofe
“Se desarrollarán tres Pilotos de Innovación Territorial en Restauración en las zonas más afectadas por los incendios en las regiones de O’Higgins, Maule y Biobío, para promover un sector agropecuario y forestal resiliente frente a futuros desastres, tanto a nivel de ordenamiento territorial, como a nivel de estrategias preventivas y alternativas productivas que abran las opciones de diversificación del productiva del secano”, detalla María José Etchegaray.
Este apoyo entregado por FIA a la zona siniestrada, se materializa en un aporte de $450 millones para la realización de todas las actividades requeridas. Estos tres pilotos serán implementados y coordinados por las siguientes entidades del MINAGRI: INIA en la región de O’Higgins, CONAF en la región del Maule, e INFOR en la región del Biobío.
Este trabajo basado en un enfoque territorial para una diversificación productiva, tiene como misión el impulsar una red de innovación interregional, para generar sinergia entre los territorios afectados. Los objetivos de los planes piloto de restauración son la recuperación y consolidación de la capacidad productiva del territorio y comunidades afectadas (ganadería-praderas; cultivos, plantaciones); la restauración del patrimonio natural y los servicios ambientales asociados ha dicho patrimonio favoreciendo la diversidad biológica; y mejorar la articulación de redes de trabajo colaborativo territoriales multidisciplinarias.
“Con estas medidas y acciones queremos contribuir al fortalecimiento de la resiliencia del sector agropecuario y forestal del territorio afectado por los incendios, mediante la generación de conocimiento tecnológico e innovadores, y articulación de redes de trabajo colaborativo territoriales multidisciplinarias”, concluye la directora ejecutiva de FIA.